Baltasar Brum - 18/06/1883 - 31/03/1933. Por Eduardo Irigoyen*

Fue Presidente a los 35 años, entre el 1° de marzo de 1919 y el 1° de marzo de 1923.

Fue colegialista.

Presidente del Consejo Nacional de Administración (colegiado).

Ministro de Relaciones Exteriores.

Ministro de Instrucción Pública.

Co-director de EL DÍA.

Presidente del Banco Hipotecario.

Fue dirigente gremial estudiantil. (Tomen nota en la FEUU).

Puso en práctica una especie de reforma agraria (distribución de la tierra por el sistema de enfiteusis).

Luchó por el salario mínimo para los trabajadores rurales.

Cuando los estancieros se ponían furiosos por las reformas radicales del Batllismo, Brum les gritó en su cara, con toda su bronca ante tanta insensibilidad: “¡Latifundistas!”.

Tras la muerte de Batlle, en plena Convención partidaria, ante el ánimo caído y el dolor colectivo, se levantó con el grito: “¡Arriba corazones!”.

Como Presidente propuso al Parlamento el reconocimiento de los derechos civiles políticos de la mujer.

Creó la institución universitaria llamada "Cátedra libre", para evitar lo que él llamaba el "monopolio de la verdad". (Tome nota el Rector Rodrigo Arocena).

Bajo su presidencia fue promulgada la ley sobre "declaración de la paternidad ilegítima" y "el reconocimiento legal de los hijos naturales", la ampliación liberal del artículo 1º de la ley de divorcio, en el sentido que "también procedería por la sola voluntad de la mujer" y la ley de represión del proxenetismo.

En pasaje por el Ministerio de Relaciones Exteriores sentó la doctrina del arbitraje amplio.

Como Ministro de Instrucción Pública, presentó proyectos de ley para fomentar la lectura y la educación popular, la creación de bibliotecas públicas para las capitales de departamentos del interior.

Fue un defensor de la doctrina del panamericanismo: "el panamericanismo implica la igualdad de todas las soberanías, grandes o pequeñas, la seguridad de que ningún país intentará amenguar las de otras, y de que han de serles reintegradas a los que las tuvieran disminuidas".

El día en que Gabriel Terra disolvió el parlamento y suspendió la constitución de 1917, Brum se atrincheró, con armas en la mano, en su casa con un grupo de amigos.

Un tiempo antes la había dicho a Domingo Arena: “No se olvide que las libertades se han defendido con la sangre de dirigentes”.

A su madre, quien fue desesperada a su casa, le dijo: “Cuando me batí a duelo, siempre le prometí que regresaría. Hoy no puedo decir lo mismo”.

Baltasar Brum esperaba que su ejemplo, generara una reacción popular, pero la población estaba entre asombrada e indiferente y no estaba acostumbrada a quiebres constitucionales desde el mismo Poder Ejecutivo.

Le ofrecieron asilo político y Terra le garantizó su seguridad. Se negó.

En horas de la tarde, se dirigió hacia la mitad de la calle, gritó: “¡Viva Batlle! ¡Viva la libertad!” y disparó su revolver contra su corazón.

Antes había dicho: “Si vivo la dictadura durará veinte años. Si muero, cinco”.

Terra fue presidente constitucional entre 1931 y 1933. Fue presidente de facto entre 1933 y 1938. Su dictadura duró cinco años.


* Eduardo Irigoyen es Funcionario del Departamento de Educación y Cultura de la Intendencia Municipal de Río Negro, Uruguay.
Periodista. Columnista invitado de LA PERSIANA (CX160 Radio Rincón, Fray Bentos), colaborador de semanario LA VOZ DE YOUNG y corresponsal en Fray Bentos de 91.1 FM de Young. Agitador cultural